Blogia

Zsa Zsa Zsu

From my new location with love

From my new location with love

Llevo sin actualizar unos días por culpa de que siempre que intento conectarme al blog, no lo consigo. Será que todos actualizamos a la vez.

Paso por unos días de novedades. Novedades en el trabajo, con la nueva oficina, nueva localización, nueva gente alrededor, nuevo medio de transporte (no me he comprado un coche, uso el mismo) y el hecho de descubrir que estar tan cerca del Megapark puede provocar que el día que salga cabreada del trabajo acabe por visitar la zona outlet y dejar la tarjeta de crédito y las tiendas temblando.

Novedades en el sentido personal-laboral cuando por fin, después de mucho tiempo aguantándome, he puesto los puntos sobre las íes a aquellos que se dedicaban a tocar las narices no sólo a mí, sino a más gente que conozco. Una tiene su paciencia y su educación, pero una cosa es ser buena y respetuosa con todo el mundo y otra es ser idiota por no saber o no querer defenderte para evitar una confrontación interdepartamental. Pues bien, el momento llegó ayer sobre las 15:30h, hora en la que se supone yo debiera haber estado acompañada por mis compañeros (valga la redundancia) y que me alegro de que no estuviesen, pues de no haber sido así, hubiese seguido comiéndome mi mala gaita y aguantando insolencias sólo por seguir sus consejos. El caso es que puse los puntos sobre las íes y parece ser que funcionó. Eso sí, para variar, después estuve toda la tarde comiéndome la cabeza con mis remordimientos. Es lo que tiene abogar por el pacifismo.

Novedades también en el sentido económico, con la declaración de la renta que ha llegado a casa; en el sentido personal, porque me apetece hacer cosas nuevas (tengo pensadas algunas) y sobre todo, porque me apetece un montón que por fin llegue el buen tiempo, para volver a disfrutar de mis paseos perrunos de las 8 de la tarde. Paseos que utilizo para escuchar música, relajarme, hacer ejercicio y pensar en mis cosas sin que nadie me moleste.

Por lo demás, todo como siempre, que no es poco. Así da gusto.

Saturday night cook

Saturday night cook

Ayer era el día en que mi hermanísima celebraba su cumpleaños. Fue hace  unos días, pero lo celebró ayer.

Estos días, he podido comprobar cómo ella y yo no nos parecemos en nada. Podría plantearse la cuestión de si una de las dos (o las dos, claro) somos adoptadas o incluso que alguna de nosotras hubiese sido intercambiada por error al nacer si no fuera por unas pequeñísimas cuestiones:

                1.- Yo soy idéntica a mi madre en todos los aspectos.  De ahí que cuando no estemos de acuerdo, se produzca un fenómeno que riete tu de la Tormenta perfecta...

                2.- Mi hermana se parece físicamente a mi abuela paterna.

Con todo ello, yo declaro que somos claramente de la misma sangre. No obstante, no entiendo cómo podemos ser tan rematadamente opuestas. Ella es paciente, yo puro nervio. Ella te deja ganar, yo tengo que competir a todas horas y ganar siempre. Ella lo intenta, yo lo tengo que conseguir todo a la primera y perfecto. Nunca intentaré nada que no vaya a conseguir en breve. Ella es despistada y un poquito perezosa para todo lo que conlleva responsabilidad. Yo estoy atenta siempre (salvo cuando el asunto es una tontería como un piano, en cuyo caso, llevo la palabra "empanada mental" escrita por todas partes) y todo que conlleve una mínima responsabilidad para mí es tan importante como vital. Ella es rubita de ojos azules y bastante alta. Yo soy morena, de ojos verdes y de estatura normalita. Ella parece que es mi hermana mayor cuando en realidad soy yo la mayor de las dos (vale, igual en esto, tengo yo la culpa por no haber cambiado físicamente desde los 16 años y por vestir de manera menos seria que ella). Como se puede apreciar, como dos gotas de agua, vamos.

El caso, es que si hay algo en lo que mi hermana tiene su virtud, es en la paciencia. De ahí que haya esperado más de una semana a encontrar su "fecha" perfecta para celebrar el cumple. Otra de las cosas buenas que tiene, es que ni ella ni sus amigas son de tirar la casa por la ventana en celebraciones. Si a esto le sumamos que mi hermana se ha convertido en fan incondicional de mi cocina y que es capaz de empezar una pelea con su amiga de toda la vida sólo porque esta última indica que mis muffins son parecidos a unos que probó una vez en tal sitio, la pregunta sería:¿qué ha hecho mi hermana? pues ha decidido que qué mejor modo de convencer a sus amigas de que yo no tengo rival que invitándolas a cenar algo que yo haya cocinado. Si alguien piensa que no acepté el reto, es que no me conoce. No hay más que decirme que alguien va a poner a prueba mi capacidad para que me vuelva competitiva. Hay que ser el mejor...jajajjaja, es que esto me puede...

Pues ahí estuve, me llevé de compras culinarias a mi hermana, ella llevando el carrito y pagando y yo cocinando y regalándome cacharritos de cocina que saqué por la cara...jajajaja. Ella por supuesto vio aquello como una inversión. Si aprendo a hacer nuevas recetas, pues mejor que mejor ¿no?. Ayer, de momento, ya le hice una  nueva. No tuvo ocasión de catarla mucho, pero hubo gente que dio buena cuenta de ella a juzgar porque no respiraban mientras la comían y porque no se oía ni el volar de una mosca...jajaja. Respecto a su cena, yo cociné durante toda la tarde y hasta la noche, pero hoy puedo asegurar que sólo había recipientes vacíos donde ayer había comida...jajajaja

 

This is the right time

This is the right time

Hoy ha sido un día laboral para recordar. Por fin hemos podido probar una super modificación que tenía realizada desde hace la tira de tiempo pero que necesitaba darse el visto bueno antes de su pase a producción (24x5 es lo que tiene...).

La pena es que ha ocurrido lo de siempre, que cuando vas para algo específico, te llueven los problemas. Menos mal que cuando estás acompañada por alguien de tu trabajo, las cosas parece que se llevan mejor. Por lo menos, en mi caso. Digo que ha sido un gran día porque he podido de alguna manera, devolverle algo de la mucha ayuda que le debo a mi compi de trabajo. No sé, ha sido como estar inspirada cuando alguien que siempre te ayuda tiene problemas con su trabajo. Y vaya problemas! por eso es él el que se suele encargar...jajajaja

Me llama la atención eso de tener días buenos, muy buenos, malos y pésimos. No entiendo cómo a veces, todo te sale a la primera y parece que el universo está a tu lado y sin embargo, es posible que al día siguiente, tengas un día más que malo.

Siempre he pensado que cada día de nuestra vida está gobernado por nuestras decisiones (que se convierten en acciones) pero acompañado siempre por las casualidades y la interacción con las acciones de otras personas. Hay veces que el factor casualidad cobra protagonismo sobre otros, esos días yo los conozco como días muy buenos o días muy malos.

Brand new day

Brand new day

Ayer tenía preparado un blog sobre las decisiones y el surrealismo, pero en el último momento, se ve que por saturación de la página, se borró todo... al menos, cumplió su objetivo, conseguí desahogarme utilizando las palabras.

Hoy es el fin de una etapa. Al menos, eso es lo que yo pienso. Ya fue el fin de otra hace 6 meses y entonces, me lo tomé mal. Sin embargo, no podía haber imaginado lo que me esperaba y, por eso, me alegro de que empezara una nueva ya que de no ser así, no hubiese conocido a gente tan dispar pero tan agradable. Es por esto por lo que el fin de esta etapa no me entristece en absoluto. Me siento optimista, en parte, porque no es un adiós, es un hasta luego y también porque en esta ocasión, yo lo he decidido, no me lo han impuesto. A aquellos que dejo atrás, les he dicho que antes de que se den cuenta, nos volveremos a ver. Y si lo pienso objetivamente, es totalmente cierto.

Me siento contenta. Siempre me ha gustado la novedad, hacer cosas nuevas y distintas. Creo que es importante que siempre haya una primera vez para todo, ya que considero que es una manera única de madurar y de aprender.

Otra de las razones por las que me siento feliz, es porque por primera vez en toda mi vida, estoy actuando en lugar de pensar que debería actuar. Este año, no he hecho como quien dice, propósitos de año nuevo. Mi único propósito era no hacer propósitos y creo, que lo he cumplido y con creces. Soy de la opinión de que los propósitos están muy bien en papel, pero se quedan en eso, propósitos. Yo este año, quería hacer cosas, actuar, no proponer.

Me obligué a decidirme a aprender a cocinar (soy un desastre para eso). Comencé en enero por aburrimiento a navegar en busca de recetas que me apeteciera cocinar. Evidentemente, con mis antecedentes de <>, pensé en la repostería. Realicé la primera receta, y ví que aquello olía y sabía bien. Pensé que la gente comía lo que yo preparaba por compromiso, pero pronto me dí cuenta de que estaban encantados con que yo cocinara. La primera receta dejó paso a la segunda, esta a la tercera, esta a la... y así, poco a poco, me he descubierto a mí misma observando más que interesada los utensilios de cocina que encuentro en cada tienda que piso. He empezado incluso a comprar "chismes" cuyo nombre no sabía hasta hace poco. Yo!!! que soy una adicta a las compras (ropa, complementos, DVDs, libros, cosméticos varios...).

Esta fiebre repostera, tuvo su momento cumbre cuando recibí el reto siguiente: <>. Bueno, dispuesta a comprobar si era capaz, me embarqué en una tarde a ello. No hice la tortilla típica, hice una variante más chic que hizo las delicias de mi retador y una alabanza de una persona totalmente objetiva y que aplaudió ante la idea de cambiar por un día de cocinera. Con esto, he descubierto que mi afán de superación y competición (contra mí misma) ha llegado a la cocina. Se descubre una nueva afición casi por aburrimiento y hartazgo de los hobbies ya existentes.

Ante esta perspectiva y descubriendo que tengo cualidades que desconocía, me he propuesto seguir adelante con otras. Prueba de ello es que he vuelto a estudiar francés (nunca me gustó demasiado), apuntarme casi sin pensar al curso de conducción económica y sacarlo de los mejores (qué le voy a hacer, tengo que ser mejor que los demás o al menos intentarlo) y la última: así, sin más, apuntarme a un cursillo de inglés de casi un mes en Toronto. Yo, que lo más que aguanto el avión es hora y media y por falta de opciones...

Veremos en qué acaba todo esto. Espero que mi racha de buenas sensaciones continúe. Aún no me creo que vaya a Toronto, pero no hay vuelta atrás y eso me encanta. Aún falta mucho, pero cada día que pasa está más cerca. ¿volveré habiéndoseme olvidado hablar castellano? jajajaj

 

Life is what happens to you while you´re busy making other plans

Life is what happens to you while you´re busy making other plans

Cita creo que de John Lennon. La he escuchado de diferentes maneras, en palabras del grupo Simple Plan "Life is what happens while you´re busy making your excuses" mucho más crítica y negativa o incluso Beyoncé en una de sus canciones hace una versión más romántica que dice "Sometimes love can pass you by, while you´re busy making plans".

El caso es que me he dado cuenta, de que para bien o para mal, un día nunca sale como lo planificas. Ayer, se supone que el plan era salir de trabajar del cliente con el horario de los viernes, comer, sentarme un rato, subir a casa de una amiga, bajar a una cita médica y salir de nuevo para tomar algo y volver a casa para cenar. El plan estaba calculado al milímetro, cada  hora planificada con tiempo suficiente para que todo saliese bien, y es que los viernes, me encanta hacer todo lo que no puedo hacer de lunes a jueves y por supuesto, descansar. Pues bien, aunque exactamente hice casi todo lo que tenía que hacer, las cosas no pudieron ser más distintas:

Para empezar, salir, salí pronto de las oficinas del cliente, exáctamente a las 14:30 (más algunos minutos de cortesía personal, para que no parezca que tienes mucha prisa por salir y perderles de vista). Y puede decirse que volví a entrar a las 14:30 con un rebote mayor. Horror, había una incidencia justo cuando salía por la puerta. "Bad timing". Bueno, más que una incidencia, era una cadena de incidencias provocadas todas por un usuario llamémosle patoso por no llamarle de otra manera. El caso es que tras hora y 45 minutos resolviendo la cadena de incidencias sobre un entorno real por fin salía definitivamente de ahí y a toda leche, por si acaso, sólo que oh oh, tenía 15 minutos para llegar a casa, comer, cambiarme de ropa, bajar un antivirus de internet, grabarlo en un cd y subir a la otra punta de mi pueblo andando para arreglar otro ordenador, el de mi amiga.... mmm yo diría que llegué tarde y lo de la ropa... pues fui en traje. Mientras subía, llamaba por teléfono para felicitar un cumpleaños (ya que me había acordado...). A las 18:15 salgo de casa de mi amiga,dirección la cita médica. Llego, me atienden y salgo de nuevo para tomar algo. Tomar algo se convierte en cena y la cena en volver a tomar algo porque resulta que mi amiga se ha encontrado con un compañero de trabajo/jefe de su marido con el que se lleva super bien y, mientras le dice que a ver si me contrata porque soy muy eficiente y sé idiomas y...resulta que ya es mañana y estoy tomando algo en un pub mientras la camarera/dueña del local, nos invita  a estar detrás de la barra pinchando música en un ordenador que gobierna un equipo de sonido a dos bandas... total, que en palabras de mi amiga "pues si es de ordenadores, que lo resuelva ella" (por mí) y yo pensando: "vamos, evidentemente en la uni te enseñan a manejar equipos de sonido...." jajajaja pero bueno, el caso es que salimos de la barra pitando en cuanto vimos que habíamos cargado (por error, claro) la música del Aserejé en la lista de reproducción....jajajaj menos mal que lo resolvió la dueña del pub y de paso, nos invitó a unos chupitos...(sin alcohol, que soy chica sana).

Salimos del pub para meternos en otro, esta vez, para encontrarnos con que estaba de camarero otro amigo/conocido de mi amiga. Conocido con el que mi amiga comparte gustos musicales (Queen, village people, Gloria Trevi, Abba... sí, por ahí van los tiros....) y que acabó por sacar su mp3 del bolsillo y cargar toda su discografía en el PC del bar.... pudo decirse que fue un momento único en la vida el ver cómo tu amiga y el camarero del bar bailaban juntos el "In the navy" de Village People. Para todo lo demás, Mastercard...jajajja

Pues bien, llegada a casa a las 3 de la mañana, llevada en coche cual princesa y acompañada por mi amiga, compañero de trabajo/jefe/amigo de su marido y la amiga de este último. Risas, lágrimas (de risa) y peligro de incontinencia por el espectáculo y la noche vivida.

Si cada vez que hago planes, la vida me va a sorprender tan gratamente como hoy, definitivamente me compro una agenda....jajajaja

Para repetir, aunque sea irrepetible. In the navy, Yes, you can sail the seven seas, In the navy, Yes, you can put your mind at ease...(ruido de palmitas...)

LA SOCIEDAD DE LA INFORMACIÓN/COMUNICACIÓN

LA SOCIEDAD DE LA INFORMACIÓN/COMUNICACIÓN

Buenooo, segundo día de blog, segundo blog y ya se ve que apunto maneras.

Hoy quisiera meditar (un poco, que si no me quedo sin neuronas) acerca de la sociedad de la información/comunicación y su influencia en el trabajo. No quiero meditar sobre lo mucho que nos ayuda, sino lo mucho que nos distrae y "desayuda". Ya, alguno pensará en la gente que lee el periódico en internet en horas de trabajo, que si chatear, que si mandar/recibir correos electrónicos de esos tontos, buscar vuelos baratos, planificar vacaciones...pero, no, no estoy precisamente pensando en ello.

Para muestra, un botón, y es que no hay nada que más odie que estar más de 8 horas trabajando en mi sitio para que justo a las 18:30, venga tu jefe, sí, ese que tienes a 10 metros de distancia y que te oye las llamadas y las veces que vas al baño y... vamos, todo. Bueno, el caso es que viene a las 18:30 a sabiendas de que tú, te marchas a esa hora y claro, qué más da que tengas 1 hora de viaje hasta tu casita, tralaralarita... bueno, pues se ve que exáctamente a las 18:29:30 se le aparece una tarea de esas programadas en el outlook (sociedad de la información, porque avisa y es moderna) que dice: "pasar revista y preguntar a tus subordinados en qué han gastado el día, hacer comentarios y repartir ánimo y ..."  el caso es que conociendo esto, pues yo ya en vez de marcharme a las 18:30, me marcho a las 18:29 que aún no le ha saltado el mensaje del dichoso outlook.

Pero ay, amigos, que la sociedad de la información avanza, y, ahora, existe una cosa llamada correítos electrónicos y banda ancha a precio tiradísimo lo que quiere decir que te manda un correíto a las 18:30:30 (ha vuelto a su sitio tras comprobar que ya te habías ido) y espera que lo respondas (con pelos y señales, sin faltas de ortografía ni palabras tipo telegrama) para cuando llegue a casa, porque a eso de las 21h, si no has contestado, no tienes sólo ese mensaje en la bandeja de entrada, sino que además, tienes el siguiente, y el siguiente y hasta el típico correo de prueba para que le respondas por si los está mandando mal... Ante esta situación, fácil solución, le dices que estás cambiando de compañía y que no te va bien la banda ancha.

Pero otra  vez, la sociedad de la información nos da la espalda, y es que, en algún momento, tú (inocentemente o fuera de tus cabales) le pasaste 1 única vez (en la vida, incluyendo reencarnaciones) tu número de teléfono de móvil. Que vamos, yo no entiendo cómo hay gente que te dice "ya te llamaré" y no te llaman y luego te dicen que han perdido tu móvil... el caso es que tú, intuyendo que el jefe no te ha hecho la visita porque no está (qué bien!!!!) pero ha dicho que te va a llamar (o no!!!) , ya sabes que te va a llamar a las 18:30h al teléfono de la oficina y listo de tí (como hoy en mi caso) has decidido salir a esa misma hora, no vaya a ser que suene el teléfono. Pero, sorpresa, hoy, exactamente según entraba por la puerta de mi casa a eso de las 19:45, me ha sonado el móvil. HORROR!!!!! LA LLAMADA, o también conocida en los anuncios como, la llamada del ahorro, sí del ahorro porque te ahorras soltar unas cuantas barbaridades ya que pretendes poder volver al día siguiente al trabajo. El caso es que he estado exáctamente 20 minutos con la llamada del ahorro, 20 minutos que me han servido para comprobar lo que una puede aguantar sin ir al baño, lo difícil que es intentar preparar la bolsa del gimnasio con una mano, dando saltitos (tenía que ir al baño urgentemente), mientras intentaba explicar al jefe un error técnico de lo más tonto y digno de 1º de informática (yo añadiría que la gente que cursa 1º de Turismo lo sacaría sin mucha dilación)...

Conclusión tras la llamada del ahorro: 1.- no he conseguido preparar la bolsa, 2.- el gimnasio se queda para mañana porque he colgado cuando en la otra punta de mi pueblo la monitora encendía la minicadena y soltaba su ya conocida "Cojo aire!!!!", 3.- mi jefe no ha entendido nada y ha dicho que mañana le pregunta a mi compañero, para que se lo explique mejor, pero que más nos vale ir arreglándolo...

Claro, yo en este punto, creo que ya entiendo porqué a los jefes les gusta llamarte a esas horas. Creo que saben que como no van a entender ni un pijo de lo que les digas, prefieren que pierdas el tiempo (el no laboral, que por el laboral te pagan) explicándoselo una y otra vez. Así, tu trabajo sigues haciéndolo durante 8 horas y luego, en tus horas libres, les explicas qué has hecho en esas 8 horas.

Bendita socidad de la información.

Zsa Zsa Zsu

Zsa Zsa Zsu

Inauguro el blog no sin tener algunos problemas de formato. Que cuál es el color que mejor definiría el blog, cómo lo titulo, bajo qué nombre lo creo... vamos, los que tiene todo el mundo. O eso espero.

El porqué de este título, pues bien, porque me gusta. Me gusta cómo suena esta onomatopeya y me gusta su significado. No sé si en castellano existe, pero es que como ya se verá más adelante, me encantan los idiomas, y sobre todo, uno en concreto, inglés. Supongo que me gusta desde que tengo uso de razón, puede que incluso sea mi preferido dado que yo creo que lo domino bastante decentemente y, de ahí el título de este blog.

Pero, ¿y qué significa? ¿existe realmente esta palabra-onomatopeya? La respuesta es sí y no. Realmente, no existe, pero en el habla inglesa tienen la "manía" de recopilar cada palabra nueva que alguien oye. Y sí, sí existe en el mundo del slang, o sea, el lenguaje coloquial, pero coloquial de veras. Se la inventó o se la atribuyen a Sarah Jessica Parker, vamos, Carrie de Sexo en Nueva York. En realidad supongo que se la inventaron los guionistas de la serie, pero bueno, esto es como todo. El caso es que Zsa Zsa Zsu es esa sensación de mariposas que te recorre el estómago cuando te enamoras. Bueno, yo aquí añadiría que es una sensación agradable de agitación, un cosquilleo, no necesariamente promovida por el enamoramiento. Me gusta la palabra, me gusta su significado  y me gusta su sonido y no, ahora mismo, no tengo Zsa Zsa Zsu en el estómago. Otros ejemplos de este movimiento de crearse palabritas y expresiones, mismamente la expresión "Salt the game" que si lo traduces, parece que quiere decir "salar el juego o el partido" pero nada más lejos de la realidad ya que podría traducirse como quitarle la gracia a una situación o aguarla.

Bueno, por hoy creo que ya es suficiente, veremos cuánto tardo en volver a actualizar. No me sobra el tiempo, pero intentaré que actualizar sea uno de mis propósitos cumplidos.

Zsa Zsa Zsu para todo el mundo.

Si teneis ocasión, escuchad el nuevo disco de Beyoncé. No es que a mi el estilo musical de esta mujer me gustase, pero reconozco que su nuevo disco ( I am... Sasha Fierce) me encandila. He de decir que el disco tiene 2 "subdiscos" el primero con canciones melódicas y suaves y el segundo ya más de discoteca, en la línea de lo que se lleva ahora. Yo, personalmente me quedo con la primera parte, merece la pena escuchar las melodías tan dispares y reflexionar con las letras.